PensarJusbaires
Revista digital
OPINIÓN
22.02.2017

LA AUTONOMÍA ES UN PROCESO, PERO YA ES HORA DE COMPLETAR EL CICLO HISTÓRICO

Por Reportaje a Dr. Juan M. Olmos
PensarJusBaires visitó al ex Presidente del Consejo Juan Manuel Olmos en su estudio jurídico, al que regresó luego de haber cumplido su mandato en el Consejo. Sabedora de su compromiso con el sistema judicial y el desarrollo de la autonomía porteña, la directora de PensarJusBaires, Dra.Alicia Pierini, encauzó la charla sobre ambos temas a los que Olmos respondió con su solvencia habitual.

PensarJusBaires: Partiendo de la base que es inminente la oleada de transferencia de competencias y de recursos, al igual que el traspaso de la infraestructura correspondiente, a lo que se agrega la migración del personal estatal nacional hacia el sistema de la Ciudad, todo indica que su ejecución será un desafío de construcción institucional de alto porte, ¿cómo se percibe -en la situación actual del Poder Judicial de CABA- la capacidad del sistema para tomar a su cargo semejante volumen de bienes tangibles e intangibles a ser traspasados de la Nación a la Ciudad en poco tiempo más? 

J. M. Olmos: Yo pienso que la Autonomía es un proceso en el tiempo, una construcción institucional que necesita una serie de factores que vayan confluyendo. Primero, tuvimos un inicio como nueva ciudad-estado. Las primeras instituciones jurisdiccionales fueron instaladas más por necesidad que por una política planificada porque vencían los edictos de policía y había que poner la justicia contravencional en marcha. Era mandato de la Constitución porteña pero a su vez decisión de la Reforma Constitucional del 94 que estableció en el art 129 el marco jurídico para la Ciudad.  

Hoy no nos corre esa urgencia de plazos, y además,  por primera vez desde entonces pareciera coincidir la voluntad política del Gobierno Nacional con la de Ciudad. Entonces lo que hay que hacer es planificar esa transferencia. Pensarla muy bien para ejecutarla muy bien. 

Confío en que el sistema está preparado para recibir la Justicia Ordinaria Nacional, pero no la recibiría toda de golpe, sino que empezaría por las vacantes que son muchas y hoy están siendo subrogadas. 

Con respecto a la infraestructura, hay que estudiar caso por caso porque muchos edificios están colapsados y me parece que es una oportunidad para realizar una fuerte inversión en nuevos edificios judiciales, pensados desde un principio para juzgados y no adaptados porque estos últimos luego no resultan acordes y entorpecen el funcionamiento jurisdiccional. 

PensarJusBaires: La última transferencia de competencias penales que sancionó el Congreso Nacional quedó en el limbo. ¿Se la va a aceptar? ¿Qué pasó con ella?

J. M. Olmos: La demora es de la Legislatura porteña, porque el Congreso Nacional la aprobó. Y la excusa, como siempre, son los fondos. El Ejecutivo local no quiso que se apruebe el tercer paquete de competencias penales porque primero quiere la transferencia de los fondos para financiarlas. Para mí fue y sigue siendo un error porque siempre que hay una oportunidad, debiéramos avanzar en el proceso de autonomía. 

PensarJusBaires: Solemos pensar las estructuras con el esquema de fortalezas y debilidades. Para el caso en análisis aquello que más preocupa es el cimbronazo que recibirá el Sistema Receptor. La CABA recibirá elementos humanos y no humanos para integrar a diversas estructuras y lograr que todo se acomode sin que ocurra un sismo administrativo ni sindical. ¿Cuáles son las fortalezas y cuáles las debilidades del sistema actual? ¿Cómo prepararse para la recepción de lo nuevo?

J. M. Olmos: La primera fortaleza que tenemos es que la infraestructura judicial y el equipamiento informático de la Ciudad es de los mejores del país y eso obligaría a nivelar para arriba. Por otro lado, la aplicación del sistema acusatorio en la ciudad rige desde la instalación del Fuero Contravencional y Faltas, y cuando se incorporaron las competencias penales del 1er y 2do convenio, se adaptaron perfectamente. Los tiempos en que se tramitaban esos delitos en Nación eran interminables, y cuando pasaron a la Ciudad se acortaron sensiblemente. 

La debilidad de nuestro sistema es que es confuso el rol administrativo, ya que el Ministerio Público de la Ciudad no es extrapoder ni autónomo ciento por ciento y hay cierta multiplicación de facultades administrativas. Para recibir semejante volumen, sería necesario unificar en la Oficina de Administración del Poder Judicial de la C.A.B.A., todas las atribuciones administrativas y de ejecución presupuestaria para que no colapse ni se superpongan gastos innecesariamente. 

PensarJusBaires: Los traspasos previstos son varios, abarcan todas las competencias penales con excepción de los delitos federales.

Además se agrega el de los fueros laboral, parte del civil y comercial, y el de consumo. Y también -parcialmente- el Ministerio Público Fiscal, el de la Defensa, Asesores Tutelares, funcionarios, empleados y auxiliares. Sin olvidarnos del fuero Penal Juvenil, puesto que los Institutos de Menores actualmente a cargo del Ministerio de Desarrollo Humano y Habitat  de Nación pasarán a cargo del Consejo de los Niños, Niñas y Adolescentes que depende del Jefe de Gobierno local. Además, otras dos estructuras actualmente nacionales pasarían a la Ciudad: el Registro de la Propiedad Inmueble y la Inspección General de Justicia

J.M. Olmos: Creo que es un plan ambicioso, que debe hacerse por etapas. Empezaría por el Registro de la Propiedad y la IGJ ya que no requiere de mayor complejidad. Sin embargo, creo que lo más lógico es que se haga un orden de prelación de acuerdo a las necesidades de la Ciudad y a la capacidad para recibirlos. En este sentido, el fuero penal ordinario debiera ser el primero en traspasarse. Seguiría con el de familia. Y claramente, pondría en marcha los concursos de los tribunales de consumo, que tendrán un impacto directo como eficaz servicio de justicia sobre la vida cotidiana. Esto en los primeros dos años se puede lograr, pero tengamos en cuenta que primero debemos lograr la infraestructura edilicia para el nuevo fuero de consumo, de lo contrario, vamos a tener jueces concursados pero sin poder darles asiento. 

PensarJusBaires: ¿Cómo imaginás un ordenamiento de estas estructuras para que puedan integrarse con las de la Ciudad? O mejor dicho: ¿cómo diseñar un proceso de transferencias de tal magnitud? ¿un solo equipo de coordinación o varios equipos por ejes-temas? ¿O una coordinación general? El decreto 273 /2013 había propuesto crear un “Consejo de Justicia de la Ciudad” de amplia integración: ¿dónde está? ¿quiénes son?

J. M. Olmos: El Consejo de la Magistratura debe jugar un rol determinante ya que como sabemos, en nuestro distrito es este órgano el que tiene el mandato constitucional de administrar el Poder Judicial.

En este sentido confío en la Comisión de transferencias que preside el Dr Reynoso para encarar este desafío. 

Actualmente las distintas áreas del Consejo tienen excelentes funcionarios al frente y están comprometidos con el proceso de transferencias. No veo necesidad de agrandar las estructuras actuales, a lo sumo refuncionalizar las existentes. 

De todos modos, algunos ajustes van a tener que hacerse. Por ejemplo: para recepcionar al fuero penal ordinario, se hace necesario ampliar el cuerpo médico forense. Respecto del decreto 273/2013 no recordaba su existencia, así que mucho no ha aportado evidentemente. 

PensarJusBaires: Un punto aparte merece el traspaso –ya efectuado parcialmente- de la Policía Federal  y su integración con la Policía Metropolitana, que llevará como conjunto una nueva nominación. ¿Cómo diseñarías –si tuvieras que hacerlo- la capacitación y formación policial habida cuenta que contamos a la fecha con el Instituto Universitario de la PFA (IUPFA) y el instituto Superior de Seguridad Pública (ISSP), y la ley 5502 nada dice acerca de la capacitación para la integración del personal, refuerzo de valores comunes, prácticas, etc.? 

J. M. Olmos: Optaría por el Instituto Superior de Seguridad Pública por una sencilla razón, se creó a partir de las garantías, principios y derechos de la constitución de la Ciudad y, fundamentalmente, porque el traspaso se hizo de la Nación a la Ciudad y no al revés. El distrito receptor es el que tiene que darle la impronta a la nueva fuerza unificada. 

PensarJusBaires: ¿No te parece lento este proceso de construcción de la autonomía, que lleva dos décadas y es más lo que falta que lo que se hizo?

J. M. Olmos: Creo que sí, que la dirigencia de la Ciudad debiera tomarse un poco más en serio la transferencia de la justicia ordinaria nacional. Ya van dos fallos en los que se pronunció la Corte Suprema por el traspaso, y es la primera vez que tanto el Ejecutivo porteño como el nacional van en la misma dirección en cuanto a fortalecer la autonomía. 

Parecería ser un tema que solo discute el Poder Judicial cuando es la tarea institucional más importante desde la Convención Constituyente del 96. En aquella oportunidad, todas las fuerzas políticas de la Ciudad dieron un paso histórico

Espero que esta dirigencia entienda que todos deben estar al frente en la responsabilidad de lograr que la Ciudad sea como una provincia más.

Viéndolo retrospectivamente, hace apenas 20 años elegíamos al Jefe de Gobierno por voto directo y ya van varias elecciones y varios mandatos sucesivos. 

Se hizo mucho, pero es hora que completemos el ciclo histórico.

 

 

 

 

NOTA: Juan Manuel Olmos es abogado, ex Presidente del Consejo de la Magistratura de CABA y del Foro Federal de Consejos de la Magistratura